Es jueves 10 de febrero, la brisa empieza a refrescar la noche desde la rambla y puntualmente a la hora citada, se va llenando la Sala Camacuá de AEBU con los debidos protocolos sanitarios.
Llegan amigos, familiares, compañeras y compañeros de militancias de hoy y de antaño de todas las edades. Ante la invitación, la mayoría elige a gusto cambiar su tapabocas por uno rosado, y esto nos va dando uno de los tonos de la asistencia.
Yo estoy con mis compañeros de REDUY.net que harán la transmisión por streaming del evento, mi lapicera Parker roja y mi libreta. Espectador y testigo atento de los gestos, movimientos y emociones contadas.
“Yo soy Aquel soy yo” , es el título de la obra que nos convoca, y aceptando la invitación ya empiezo a jugar con las palabras y la duda: ¿Él es quién es él?. ¿Quién es el autor? ¿Es el autor quién narra? ¿Qué dice este libro que hoy nos reúne de él?
El autor, es Germán R. Pérez García. Y para quién escribe es un placer invitar a conocerle a través de quienes hicieron sentido uso de la palabra en la presentación.
Cuidando las palabras:
La primera y emocionada oratoria es del actor, director, docente y dramaturgo multipremiado
Iván Solarich.
Iván conoció a Germán en el 94. Como compañero de jurado del concurso de carnaval.
Es un libro bien escrito, de una calidad literaria indesmentible. Está bien escrito, y es un placer enorme.
El libro, fue concebido durante una vida entera, pero gestado en la tranquilidad de las costas del balneario canario Santa Ana. Y en la reflexión del poeta canario Atahualpa del Cioppo, apoya Solarich su crítica: “El arma más potente que tenemos los artistas es la calidad”
Un libro entrañable, de un compañero entrañable, entrañablemente uruguayo.
Solarich, es hombre de teatro, y las pausas y los silencios se vuelven complemento sonoro fundamental de las palabras que va compartiendo sin ocultar la emoción.
En Uruguay, Germán pertenece a la mitad del país, nos dice, y aporta una palabra que si bien no está, podríamos incorporar tranquilamente los orientales al diccionario:
“Uruguayitud”.
Para Solarich, gran lector y autodidacta, una de las claves del libro es que la peripecia de vida del autor, y su literatura, están atravesadas por señales que hacen a la génesis de la uruguayitud y de la cultura de izquierda, que es hace décadas la mitad del país.
Barrio, barro, fútbol, boliche, carnaval, trabajador, funcionario público, militante social, sindical y político.
A este tipo lo que le importa es la gente, y ese pequeño detalle atraviesa su literatura.
Se autogestiona los sueños y las ideas. Y esto también es de uruguayos, por eso al libro hay que comprarlo. Leerlo y comprarlo.
Destaca Solarich en el autor a un ser optimista, esperanzador y altruista.
Va con solemnidad a la página 197 y recita el final de Cuento de una mañana :
¡Sólo hay que saber escuchar, observar y vivir!
Voy a hacer de cuenta como que ustedes no están… (Para cerrar, Iván se traslada, y nos traslada en el tiempo a una anécdota íntima, que a partir de este momento será colectiva a pesar de su carácter personal).
Cuando promediando el año 76, con 16 años, salgo de la cárcel de menores.
Me procesó un juez militar por asociación subversiva, el mismo que procesó a mi madre. Al integrarme a la semi-clandestinidad mi nombre en la clandestinidad era “Germán”.
Lo había adoptado en la total admiración de cuando conocí allá por el Cerro y me cautivó la figura de Germán Araujo. Su locuacidad, su coraje, su inteligencia, eran tal que yo dije: Yo quiero ser Germán.
De no haberlo conocido, te lo puedo decir hoy,
me alcanzaría simplemente con conocerte y saber tu recorrido de persona de bien, de uruguayo, de hombre de izquierda, para sentir, que Yo también soy Germán.
Iván lo logra una vez más. Acto seguido, el silencio absoluto,
se transforma unánime, en emocionado aplauso.
Abrazo con el autor. ¡Que abrazo!
El camino de tantos y tantas:
Es el turno de hacer uso de la palabra de la ex Senadora de la República, ex Ministra de Desarrollo Social y “por encima de cualquier cosa” Maestra de Escuela, Marina Arismendi.
El libro me retrotrae a muchas experiencias vividas. Con su más cálido tono docente, Marina elogió del autor primero su memoria:
La memoria de calles, esquinas, lugares, anécdotas y los sucesos en el paisaje en esos barrios obreros que juegan un rol tan importante en la vida de las personas y en la vida de Germán como persona, amigo y ser humano, es impresionante.
Hay un camino que recorre el libro, que es el camino de Germán, pero también es el camino de tantos y tantas, en los trabajos y la lucha de aquella época.
Para Marina, el libro es un aporte muy importante para las generaciones que nacieron después.
El hecho de que aparezca uno de nuestros compañeros de la 20 asesinados no es casualidad. Es parte de esa historia de lucha y de formación de conciencia.
Hay toda una historia de experiencias vividas donde cualquiera se puede reflejar.
Literatura política, es un género literario. Y de lecturas literarias claro que se pueden hacer reflexiones filosóficas y políticas. Más aquí, en esta presentación donde literatura y política van tan entrelazadas.
La política madura, comparte algunas preguntas que se hace a partir de la lectura:
¿Será que cada generación tendrá que volver a vivir todo otra vez? ¿Será que si uno no hace la experiencia, hasta que no lo viva no lo hace suyo?
Es un gran desafío para aquellas y aquellos que somos de izquierda el cómo transmitir la experiencia propia, le responde al atento auditorio dejando abierta las interrogantes.
“Prohibido Ejercer la profesión en todo el territorio de la República”
En una breve anécdota personal, de las luchas por la educación pública, Marina ilustra el leitmotiv de sus inquietudes.
En el año 69 se recibió de maestra. En el 71, hubo una enorme huelga contra la ley Saguinetti. En el año 89, en gobierno de Sanguinetti, hubo otra huelga en defensa de la escuela pública, y un maestro recién recibido le expresa: “Al fin tuvimos nuestra huelga, porque siempre era la de ustedes”.
En las elecciones nacionales de 1994 ocupa el primer lugar en la lista del PCU, siendo electa por primera vez Senadora. Ahí, conoce a Germán representando a la dirigencia sindical de Cofe, rememora, después concejal del gobierno municipal.
“Hacer que la gente participe hace que la gente se apropie de las transformaciones sociales.”
Comparten gestión en el MIDES: esa construcción heroica y amada. Donde metimos todo lo que sabíamos y podíamos en el acierto y en el error. Marina no esconde su orgullo por aquella gesta de conquista de derechos que significó la creación del Ministerio de Desarrollo Social de la cual fue primer Ministra en el primer gobierno de izquierda del país, volviendo a ocupar el cargo en el segundo mandato del Dr. Tabaré Vázquez.
“Ese edificio del Banco de Crédito robado, que no lo robó ningún pichi, es el lugar para el primer Ministerio de Desarrollo de las políticas sociales del Uruguay. Es un signo, hay mucho de simbólico en todo esto.“
(Marina Arismendi)
En ese camino de transformación de la sociedad con justicia social, con derechos humanos para todas y todos. En ese camino, Germán es un partícipe directo de esa construcción, eso es lo que él refleja en este libro.
Esas mañanas amargueando, son las que nos acongojan por un lado pero por otro lado, esos pájaros que él narra y esos colores son los que nos dicen que hay que seguir: ¡Gracias Germán!
En primera persona:
Si esta crónica cumple su función, hemos descubierto ya la persona del autor y sus motivaciones profundas. Él es Germán R. Pérez García, el padre intelectual de “Yo soy aquel soy yo”, por eso para terminar, dejaremos que hable en primera persona sobre los detalles de su proceso creativo y la obra.
“Es un momento esperado largamente. Es muy difícil explicar el sentimiento hacia todos los que están acá. Cada uno, cada una, son protagonistas en mi libro.
Es la primera vez que tengo tiempo para escribir. En abril de 2021 empecé a escribir cosas que tenía en la cabeza y en el corazón.
Hoy por suerte en la fila del medio están mis amigos de siempre. Este libro es un tributo a esas amistades del barrio.
¿Para quién escribo yo? El primer compromiso que tengo es con mis nietos, y mis hijos grandes. Para que algún día sepan que significaba la ausencia de su padre en aquel momento, porque estaba militando.
A mi me hace bien escribir. En mi cabeza estaba que yo iba a escribir mi vida, pero empezaron a florecer cosas que eran más que mi vida: poesías, cuentos, un bloque de letras para una murga imaginaria como buen tejano.
Si algo me enseñó fueron los chicos del Programa PEL que trabajaron con nosotros en el MIDES.
“El MIDES de la creación, sensible, solidario, lo que hacía era abrazar. Con esos chiquilines aprendimos e hicimos historia ahí. A la juventud hay que defenderla, amarla, arrimarla.” Aporta desde la platea como testimonio una compañera de gestión bastante más joven que el autor pero igual de emocionada.
Ha sido de suma importancia la presencia de ustedes aquí.
De seguir construyendo una sociedad más justa, de eso se trata.”
Suena, la Retirada 2018 de Murga La Clave.
Pasan, fotos de tanta vida siempre compartida.
Aparece, una Pantera Rosa divertida.
Quedan, gratos momentos en la memoria
y en la tinta que alumbran, como las luces
de las embarcaciones en la bahía,
esta fugaz despedida.
Crónica: John Díaz Cortés.
Fotografía: Nicolás Pizarro.
Producción: REDUY.net.
El abrazo de las palabras se pierde en la multitud como una anécdota más hasta que Germán los rescata y se los devuelve a las vidas de quienes toman la política como un acto de amor y la amistad como la confianza en los principios que nos imponen la responsabilidad histórica de ser de izquierda. Bien Jhon
Estoy orgullosa de haber estado presente y de acompañar a un amigo y compañero. Una persona excepcional. Sin conocerlo mucho fui sumando paso a paso y ver cómo acompaño a nuestra cooperativa. Y lucho junto a nosotros hoy puedo comentarles que el libro es maravilloso me llevo a la infancia y fue creciendo junto. Con mi adolescencia y madures. Un libro exquisito para leer gracias por. Dejarme compartir el nacimiento de un hijo más orguchosa de pertenecer a este país. Mi país Uruguay Solo gracias Germán
Lamentablemente no pude asistir pero me encantó leer todo ésto. German es mi cliente de la peluquería hace uno cuantos años . Se lo extraña lejos de montevideo ya . Lo admiro y le tengo gran cariño ! Muchos éxitos Germán. Mereces los mejor . Beso grande de Natalia y familia