Los tres aspirantes a presidir el Frente Amplio fueron los oradores del primer acto unitario y por el SÍ a la derogación de los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC).
Fotos: Antonio Scuro
En orden por el uso de la palabra, que fue resultado de un sorteo, hablaron Ivonne Passada, Fernando Pereira y Gonzalo Civila.
La particularidad del acto es que se trató de una actividad organizada por el comité de base 9 de Julio de la esquina de Mariano Soler y Dr. Pablo Ehrlich, del barrio Brazo Oriental antes que se hubiera integrado el comando de la fuerza política.
Hileras de sillas de plástico blancas, un par de parlantes, banderines de tres colores, una bandera de Otorgués, el sorteo del orden de los oradores, las plantas que les regalaron fueron detalles a cargo de los vecinos de esa parte del Municipio C.
Una de las características del acto fue que “la candidata y los candidatos” -como se dijo con frecuencia en aras de la paridad- mostraron puntos en común y se las ingeniaron para exhibir matices a la vez.
Los tres coincidieron en priorizar la campaña contra la derogación parcial de la LUC poniendo de relieve la importancia de los 135 artículos cuestionados como parte central de un programa de gobierno.
También apelaron a la solidaridad de la gente, reivindicaron el diálogo cara a cara en la campaña, llamando a evitar el choque con los que opinan diferente.
A su vez, señalaron la importancia de la acción de los comités de base como lugares en los que se da la discusión política y desde dónde abrirse a la sociedad.
Otra coincidencia fue que Pereira y Civila recalcaron la importancia de reivindicar los logros del FA, advirtiendo que se “hizo mucho para la gente, pero muchas veces sin la gente”.
Para ambos dirigentes, esa actitud explica en parte la derrota electoral tras quince años de gobiernos de la fuerza política.
No obstante, los tres se las ingeniaron para marcar perfiles. Passada hizo alusión que se lograron avances en los temas que hacen a las mujeres, logrando ser “iguales en derechos y no en oportunidades”.
Otro matiz estuvo en la caracterización del gobierno. Mientras que para Pereira, la coalición multicolor carece de rumbo e ideas, Civila dijo que no lo veía así, en tanto la orientación de la coalición es claramente la de un Robin Hood al revés: robar a los pobres para darle más a los ricos.
Por su parte, Civila hizo hincapié en la necesidad de una mayor autocrítica del FA, preguntando de manera retórica que si no se hacía ahora, cuándo se la efectuaría, en medio de la próxima campaña electoral.
Entre otros conceptos, Pereira sostuvo que el FA “vino para cambiar la educación, y duplicó el presupuesto educativo, no estamos defendiendo suficientemente bien lo que hicimos en las escuelas”.
Passada destacó la importancia de la militancia de base y sostuvo que “Doy fe de este comité, porque cada vez que pasaba por esta esquina, veía la hora que era y había compañeros y compañeras esperando a acá en la puerta. Esperaban hasta el último vecino y vecina que pasaba para levantar esa firma”.
La exlegisladora aseveró que entre los conceptos a poner de relieve en la campaña por el SÍ a la derogación es cómo se afecta a la educación. Reparó en que se quiere dejar de hablar de la enseñanza pública para calificarla como “Enseñanza Nacional” como paso hacia la privatización.
Civila acotó que “estamos parados además en un momento histórico y una situación de Uruguay en la que es importante reflexionar”.
“Quiero hacer referencia a una situación que trasciende al Uruguay. Algunos hablan del malestar con las democracias, y dicen que se están hartando de la forma de organización política y social, que urgen”.
“Lamentablemente esos malestares se canalizan por zonas muy diversas, muchas veces, se canalizan por derecha”.
