Considerados patrimonio invaluable para la humanidad, nosotros, con pequeñas acciones podemos aportar nuestra cuota de colaboración con el cuidado de los humedales y el bienestar del planeta.
El 2 de febrero de 1971 se celebró la Convención sobre los Humedales de Importancia Internacional en Ramsar (Irán), y recién 26 años después, en 1997 fue decretado el Día Mundial de los Humedales.
Las extensiones de tierra denominadas humedales son ecosistemas donde viven y se desarrollan un gran número de animales y vegetales que además de proveer a millones de habitantes agua dulce y alimentos, regulan el ciclo del agua y controlan los efectos del cambio climático.
Estos reservorios inundados permanentemente por agua dulce o salada: ríos, lagos, arrecifes de coral, turberas, manglares, marismas, pantanos, etc. son imitados en forma artificial por el hombre: salinas, estanques y embalses por ejemplo, ya que han desaparecido más del 50% de ellos en menos de 4 décadas.
La toma de conciencia de los cuidados requeridos para su preservación tiene que ver con no contaminar con basura y desechos tóxicos, preservar las especies que habitan estos ecosistemas evitando la caza y la pesca, ser turistas amigables practicando recreaciones pasivas, denunciar irregularidades y posibles daños que descompensen el equilibrio de los humedales.
